¡Feliz día del Estudiante!
¡Que los barbijos no nos impidan disfrutar los aromas propios de la Primavera, ni oculten las sonrisas que cada 21 de septiembre iluminan nuestros encuentros!
El verde tan característico de nuestros patios comenzó a estallar, y las flores ya dijeron “presente”. Pareciera que la naturaleza se empecinara en ir a contramano de la nostalgia y el pesar que seguramente sentimos al tener que estar encerrados. Y aunque así parezca, la naturaleza no se nos está riendo, sino más bien nos está invitando a volver los ojos a su renovado espectáculo para señalarnos el camino del reencuentro, para mirar con esperanza.
Porque hoy extrañaremos vernos y estar juntos para celebrar la vida como corresponde. Nuestras aulas estarán vacías, los pasillos deshabitados, nuestros patios desiertos y sin la música y el sonido de los juegos, o los mates compartidos, tal como lo hacemos cada año para el Día del Estudiante.
Pero nuestra próxima juntada, seguramente va a ser mejor… la disfrutaremos a pleno, y toda esta pausa aparentemente absurda, con su silencio ensordecedor, nos permitirá valorar aún más la amistad, el compañerismo, y el logro único de haber conquistado juntos el sentido profundo de la “vida”.
En medio de esta situación tan particular, quienes compartimos la vida en la Universidad del Aconcagua, a todos y a cada uno de los estudiantes que constituyen nuestra razón de ser, les deseamos un ¡muy feliz día del Estudiante!