DERIG: Área de Discapacidad: “La maternidad en mujeres con discapacidad. El lado B de la maternidad”
Autores:
Karina Ailín Bustos. DNI: 42010266. 5to año.
Martina Colque. DNI: 43279799. 3er año.
Kevin Mattiazzo. DNI: 37413711. 5to año.
Karina Ailín Bustos. DNI: 42010266. 5to año.
Martina Colque. DNI: 43279799. 3er año.
Kevin Mattiazzo. DNI: 37413711. 5to año.
Aportes al Área de Discapacidad de Estudiantes de la Licenciatura en Psicología.
Durante el mes de octubre se hablará mucho acerca de las madres, la maternidad, los modos de ser mamá… Hoy les proponemos pensar el tema desde un punto de vista no tan común.
Para poder entrar un poco más en la temática que nos convoca, nos gustaría compartir una definición sobre lo que es la maternidad. Palomar piensa en la maternidad como “un fenómeno sociocultural complejo que trasciende los aspectos biológicos de la gestación y del parto, pues tiene además componentes psicológicos, sociales, culturales y afectivos del ser madre que se construyen en la interacción de las mujeres con otras personas en escenarios particulares, donde se viven universos simbólicos con significados propios”.
Si hablamos de maternidad en mujeres con discapacidad, esto nos lleva a aclarar qué entendemos por discapacidad. Para ello partiremos de un enfoque biopsicosocial en el que se define a la discapacidad desde el punto de vista relacional, como el resultado de interacciones complejas entre las limitaciones funcionales (físicas, sensoriales, intelectuales o mentales) de la persona y del ambiente social y físico que representan las circunstancias en las que vive esa persona.
El cambio de paradigma de este modelo posibilita pensar que las limitaciones funcionales que pueda tener una persona no son sinónimo de discapacidad. Al poner el acento en el aspecto relacional se le quita el peso a las dificultades que la persona tiene y se considera cuán amable es su entorno en función de las accesibilidades o barreras que el mismo genere, dando lugar a que la persona pueda potenciarse o limitarse.
Entonces abordar el tema de la maternidad desde la discapacidad implica tener presente que es imposible apreciar completamente sus complejidades, procesos y consecuencias sin recurrir al entorno social y a la interacción de la mujer con discapacidad con el mismo.
Sin duda, parece que ser madre se relaciona con generar vida, con entender que la vida pasa a través de la mujer. Y esto no solamente abarca la esfera de lo biológico: la maternidad más bien tiene que ver con la capacidad de la mujer de generar un «nido», donde sostener y albergar al niño que llega, con la capacidad de retener, cuidar y anidar.
Ahora bien, es necesario mencionar que la sexualidad de las personas con discapacidad sigue siendo un tema tabú, negado socialmente, cargado de prejuicios y mitos. La imagen asexuada, infantil y dependiente de las personas con discapacidad es uno de los principales factores que inciden en la vulneración de sus derechos, en particular de los sexuales y reproductivos. Estas imágenes generan prácticas sociales discriminatorias que afectan directamente a las personas.
Mientras algunas mujeres luchaban contra el mandato de tener hijos/as de manera obligatoria, las mujeres con discapacidad aún continúan reivindicando su derecho a la maternidad por ser víctimas de esterilizaciones compulsivas o, en menor grado, de mandatos más sutiles -pero no menos opresivos- como el de “no debes tener hijos/as”.
Pese a ello, muchas mujeres con discapacidad ejercen la maternidad teniendo que soportar cuestionamientos tanto en relación a su derecho de tenerlos, como al modo en el que ejercen su rol maternal.
Según el Ministerio de Salud de la Nación, los Derechos Sexuales son los derechos vinculados a la capacidad de disfrutar una sexualidad libremente elegida, de manera satisfactoria, placentera, sin violencia, coerción ni riesgos. Los Derechos Reproductivos están relacionados a la posibilidad de decidir -en forma autónoma y sin discriminación- si se desea tener o no tener hijos/as, en qué cantidad y espaciamiento entre unos/as y otros/as, y con quién se desea tenerlos. Para esto se requiere disponer de información suficiente y acceso a los medios adecuados.
La Convención sobre los Derechos de las PcD reconoce el derecho a tener hijos/as y a formar una familia. La única condición necesaria para cualquier persona es la de tener la capacidad de maternar a un hijo/a, protegerlo/a, acompañarlo/a en su crecimiento, brindarle la contención emocional necesaria para un desarrollo satisfactorio. Puede ocurrir que algunas mujeres con discapacidad puedan requerir algún apoyo puntual para ejercer este rol, por ejemplo: la necesidad de tener asistencia en la limpieza, encaminar tareas domésticas pesadas o bien llevar y traer del colegio a los hijos e hijas. Pero lo cierto es que en mayor o menor medida todas las personas necesitan de apoyos para ejercer estos roles.
Es preciso deconstruir la representación de la maternidad de la mujer con discapacidad, que ha enfatizado en la ineptitud y las consecuencias negativas en el desarrollo de sus hijos sanos. Resulta sumamente enriquecedor intentar conocer tanto las vivencias de las dificultades con las que se enfrentan estas madres singulares, como así también sus recursos para solventarlas, sus logros y su desempeño en la crianza.
Bibliografía
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Pérez, J. Publicado: 2021. Definición de: Definición de maternidad. Recuperado de https://definicion.de/maternidad/
Fernández, M. Discapacidad materna y vínculo temprano. Desde https://elcisne.org/discapacidad-materna-y-vinculo-temprano-capacitadas-como-madres/
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Amorín, E.; Buceta, C.; Dones, A; Gonzalez, V.; Grassia, A.; Lemura, L.; Minieri, S. (2021). Desear es mi derecho. Sexualidad y autonomía de las mujeres con discapacidad. Buenos Aires. Ed. Lengua Franca.